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Alabado por muchos, y temido por unos pocos, el 5G lleva siendo noticia desde su lanzamiento, revolucionando los estándares tecnológicos y despertando los temores más irracionales de la población. Hablamos de él constantemente, pero ¿sabemos lo que es realmente esta nueva red móvil? En este post te contamos qué es el 5G y por qué todo el mundo habla de él. ¿Es tan revolucionario como puede parecer? ¿Cambiará el uso que le hacemos a nuestros dispositivos electrónicos? ¡Sigue leyendo para descubrirlo!
Antes de hablar sobre los beneficios tecnológicos de esta nueva red, necesitamos dejar claro lo más elemental: qué es y cómo surgió el 5G. Aunque la respuesta corta sería “lleva en desarrollo desde el 2008 y es la red móvil más rápida que ha existido hasta el momento” queremos ir más allá y explicar cómo funcionan los entresijos de la telefonía móvil. Intentaremos no ponernos demasiado técnicos en la explicación.
La telefonía móvil es nuestro conocidísimo medio de comunicación inalámbrico realizado a través de ondas electromagnéticas que utilizamos desde hace décadas a través de nuestros dispositivos móviles. Aunque ya se hubiesen desarrollado sistemas de comunicación móvil en los años 50, su uso fue popularizado a finales de los años 80 a través de redes comerciales de compañías tan famosas como Motorola. A partir de ahí los móviles no nos han abandonado, siendo un aparato tecnológico cada vez más útil e imprescindible.
El 5G no deja de ser una nueva generación de telefonía móvil que sucede a otras tantas, como el 2G, 3G o 4G. Para que te hagas una idea, el 2G significó una revolución porque a través de él los móviles pudieron empezar a realizar envíos de SMS, acelerando la digitalización de los teléfonos. Hoy en día ese tipo de red quedó obsoleta, ya que con la llegada del 3G y el 4G pudimos ir más allá con los mensajes instantáneos, el streaming, etc.
Con el 5G llega también una nueva infraestructura de redes celulares capaces de aportarnos cobertura a un número de usuarios de dispositivos móviles cada vez más creciente. El 5G es un proyecto ambicioso que supuso una gran inversión por parte de empresas de telecomunicaciones, instituciones y fabricantes tecnológicos. Es por ello que su desarrollo lleva gestándose desde hace más de 10 años.
Si el 2G trajo la moda de los SMS, el 3G la de los mensajes instantáneos y el actual 4G la fiebre por las historias de Instagram, el 5G promete ir más allá siendo la generación de comunicaciones inalámbrica más veloz hasta el momento. De hecho, se estima que sea entre 10 y 20 veces más rápida que las conexiones móviles actuales.
Con el estándar oficial aprobado, llega el momento de que se unan las distintas operadoras a la “fiesta” del 5G, ofreciendo cobertura a sus clientes. Eso quiere decir que si compras un móvil que soporta 5G y te haces con esa cobertura, podrás disfrutar de la velocidad de carga más alta que ha existido hasta ahora.
¿Cómo repercute esto en tu usabilidad? En primer lugar, podrás navegar a una velocidad vertiginosa: hasta 10GB por segundo, reduciendo la latencia a milisegundos. Es decir, podrás disfrutar de una conexión a tiempo prácticamente real.
Esto no sólo se reflejará en la visualización de contenido en directo o las videoconferencias, sino también en el tiempo de respuesta de cualquier dispositivo. Y es que esa es otra de las características del 5G: la posibilidad de que cualquier tecnología adherida a él pueda operar con un periodo de latencia mínimo. Imagínate la precisión que puede aportar la conexión 5G a robots industriales, vehículos autónomos o sin ir más lejos, tus propios electrodomésticos.
Desde luego el impacto del 5G estará presente no sólo en la conectividad de tu teléfono móvil, sino también en áreas como la domótica o incluso el mobiliario urbano, ofreciendo la posibilidad de que se digitalicen muchos aspectos de nuestra vida cotidiana.
Una novedad tecnológica como el 5G no iba a pasar desapercibida también por el sector de la población más alarmista. Son diversas las teorías que circulan alrededor del 5G, todas ellas fruto de la desinformación.
La realidad es que el 5G supone el mismo peligro sanitario que, por ejemplo, el café, la fibra de vidrio o la cerámica. La OMS ha catalogado ese tipo de conectividad con un nivel cancerígeno 2B, donde también se incluyen más de 200 agentes, muchos de ellos de uso cotidiano.
Parece que la llegada del 5G ha reavivado un debate abierto desde el lanzamiento de este tipo de conectividades inalámbricas en 1990, por lo que si ya has vivido las 4 generaciones anteriores de telefonía móvil, esta no tiene por qué significar un peligro nuevo para tu salud.
El 5G aún está dando sus primeros pasos en España, operando bajo la única banda permitida en el país: la de 3,6 GHz. Por el momento es Movistar la operadora con el despliegue más grande de cobertura, llegando al 80% de la población española.
Sin embargo, las demás operadoras aún tienen la oportunidad de hacerse con los demás rangos de frecuencia que aseguren velocidades más altas. Se prevé que este año se subasten las bandas de los 700 MHz y los 26 GHz.
Por lo tanto, si estás pensando adquirir un móvil de última generación, puedes estar tranquilo: el 5G ya está disponible para ti, aunque aún en su primera fase de despliegue.
Esperamos que este post te haya ayudado a resolver todas tus dudas sobre el 5G. Sigue atento a las demás publicaciones, estamos al tanto de todas las novedades tecnológicas. 😉
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